
Después me vino a ver la tía Clarita...

Y luego mi papi se fue a Buenos Aires, a una conferencia. Para que no nos diera mucha pena, en la noche nos vino a visitar la tía Claudinha...

Pero igual lo eché de menos y estuve llorando un poco. Es que nunca me había ido a dormir sin darle un besito de buenas noches. Eso sí, al poco rato se me pasó y me porté muy bien.

Hoy tuvimos varias visitas: mi abueli Sally, mi opa Jonny y mi tía abuela Nelly, que me trajo besos y regalos de los tíos y primos de Nueva York y Nueva Jersey.

